A la hora de elegir el sistema de calefacción que vamos a instalar lo primero que debemos decidir es el tipo de combustible que tenemos más accesible.
Utilizar los productos adecuados optimiza el funcionamiento y alarga la vida útil de la máquina.
Leña
Es importante saber que la madera fresca/húmeda puede dañar el interior de las chimeneas fabricadas en vermiculita. Las maderas duras mantienen el fuego vivo durante más tiempo y tienen mayor poder calorífico, por otro lado, las maderas blandas son ideales para encender y avivar el fuego de manera puntual, por contra perderemos poder calorífico.
Pellet
Es un combustible ecológico a base de madera de pino prensado. Está certificado por el sello de calidad EN-plus A1. Tiene un alto poder calorífico, es económico y sostenible, ya que tiene un bajo nivel de emisiones de CO2. No producen olores ni tienen riesgo de explosión.
Cuidados diarios
Para optimizar nuestra estufa o chimenea es fundamental hacer un buen mantenimiento, aspirar las cenizas antes o después de cada uso asegura el buen rendimiento del combustible utilizado, así como mantener la limpieza del cristal.
Salida de Humos
Es muy importante mantener limpia la salida de humos de nuestra estufa o chimenea. Para ello es recomendable revisarlas al menos antes del inicio de la temporada, así como realizarle una limpieza anual más intensa, mediante deshollinadores específicos.